La energía eólica marina ha cobrado gran relevancia en los Estados Unidos, pero aún se encuentra rezagada en comparación con Europa y China en términos de capacidad de energía limpia. El presidente Joe Biden se ha propuesto alcanzar 30 gigavatios de energía eólica marina para 2030, aunque la industria ha enfrentado obstáculos y retrasos en la fabricación de aerogeneradores.
Los mayores desafíos para la industria eólica marina en EE. UU. son los obstáculos económicos causados por la inflación y el aumento de las tasas de interés, lo que ha generado retrasos en el desarrollo de proyectos. Existen inquietudes sobre el impacto en varamientos y muertes de ballenas en los parques eólicos marinos, aunque no hay evidencia científica que respalde esta conexión.
A pesar de los desafíos, la administración Biden ha aprobado tres proyectos comerciales de energía eólica marina y está revisando 16 más. Sin embargo, algunos proyectos se han detenido debido a los altos costos de construcción, lo que ha llevado a los desarrolladores a reconsiderar sus ofertas el próximo año. La industria enfrenta el dilema de la cadena de suministro: necesita infraestructura técnica y especializada, así como proyectos aprobados para implementarla.
La industria eólica marina en los EE. UU. está en una etapa inicial y no solo busca construir turbinas, sino desarrollar toda una industria. La capacidad instalada de la energía eólica marina está considerablemente rezagada en comparación con la energía eólica terrestre y solar. Los altos costos de los aerogeneradores y la infraestructura subdesarrollada son factores que han contribuido a esta diferencia.
El potencial de la energía eólica marina en los EE. UU. es enorme y la inversión de la administración Biden demuestra un fuerte compromiso con su desarrollo. Con una infraestructura adecuada, cadena de suministro y políticas de apoyo, el país podría alcanzar a Europa y China en capacidad de energía eólica marina, generando empleo y reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles. Sin embargo, se requiere un esfuerzo continuo para que la energía eólica marina se integre plenamente en la combinación energética de los EE. UU.