En Europa, un número creciente de aerogeneradores está llegando al final de su vida útil, y aunque la repotenciación de parques eólicos (reemplazar turbinas antiguas por modelos más modernos) ha demostrado ser altamente eficiente, su adopción aún es insuficiente. Esta técnica permite triplicar la producción energética en un mismo emplazamiento, mientras reduce el número de turbinas en un 25%.

Ventajas de la repotenciación

  • Más energía, menos turbinas: Las turbinas modernas cuentan con palas más largas, mejor aerodinámica y sistemas avanzados de control, lo que permite generar más energía de manera estable, incluso en condiciones de viento bajas.
  • Uso eficiente de recursos: Los parques eólicos más antiguos están ubicados en los mejores emplazamientos, pero operan con tecnología obsoleta. Actualizarlos elimina la necesidad de nuevas conexiones a la red y mantiene el apoyo de las comunidades locales.

Barreras y desafíos

  • Regulaciones estrictas: Países como Francia enfrentan limitaciones debido a restricciones de altura en las turbinas.
  • Conexiones a la red: En España, las dificultades para obtener conexiones a la red desalientan la repotenciación, manteniendo en funcionamiento turbinas menos eficientes.
  • Procedimientos lentos: En toda Europa, los permisos excesivamente largos y complejos frenan el avance de proyectos de repotenciación.

El reto del reciclaje

El seminario EoLIS 2024 destacó la importancia de abordar los residuos de turbinas eólicas, especialmente las palas, que representan un 11% de su volumen total y son difíciles de reciclar. Aunque actualmente los volúmenes de desechos son bajos, se prevé que aumenten a más de 100.000 toneladas anuales para 2040.

Proyectos innovadores ya están reutilizando palas en muebles, barcos y parques infantiles, pero se necesita una mayor colaboración para desarrollar soluciones de reciclaje económicamente viables.

La repotenciación y el reciclaje son fundamentales para maximizar el potencial de la energía eólica en Europa. Sin embargo, lograrlo requiere un esfuerzo coordinado entre gobiernos, empresas y comunidades para superar barreras regulatorias, mejorar los procesos de permisos y avanzar hacia tecnologías totalmente reciclables.

Con estas medidas, Europa podría no solo aprovechar plenamente su capacidad eólica, sino también liderar la transición hacia un futuro energético más sostenible.